Cómo voy a poder explicarte lo que siento día a día a través de una pantalla? ¿Cómo esperamos que a esta edad, pueda pensar que lo nuestro tiene futuro y que no olvidarte, valdrá la pena?, ¿Cómo podemos pensar que el destino nos tiene preparado algo bueno? ¿Cómo es que esperamos, podernos esperar tanto tiempo?
Se colapsa cada molécula de mi cuerpo, al pensar que quizá tenga que olvidarte y comenzar a mirar hacia otros lados.
Es esa reacción de mi cuerpo, que dice no querer dejarte, porque me hiciste y me haces feliz. Pero es esa otra parte que grita y que llora cuando piensa que dejaras de hacerme bien en el momento que de ti haya que desprenderme.
Ser realista es la peor opción que se me viene a la mente. El realismo es el antagonista de la esperanza y si algo hay que conservar, es esta última.
Espero no esperar en vano, espero que lo que espere, no sea lo inesperado.
Dicen que lo que amas, hay que dejarlo ir… pero ¿por qué dejaría ir algo que amo? Es totalmente absurdo e ilógico. Generalmente hay que pelear por lo que se quiere, pero aquí no hay opción, no encuentro salida.
¿Sabes que es una tontería?
-Esta carta.
-¿Por qué?
- Porque no hará que te quedes, ni que yo pueda ir contigo, porque no asegurará el futuro, ni nos dará más tiempo para vivir como el pasado que continuamente repetimos en nuestras cabezas, porque cada vez se hace más y más corto el presente y se siente como sí el mañana estuviera cada segundo demasiado cerca.
No me queda más que vivir el aquí y ahora, de lo demás se encargará el destino, que vive en el mañana, que se aloja en el futuro, que aunque odie esperar amor, esperare… Ya no encuentro otra salida más que quedarme adentro de esta triste historia.
Solo puedo decirte que hoy… Te amo y eso es lo único que importa.
Un beso preciosa
Domingo Martin C.
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