Qué sentimiento exalta hoy
mis sentidos, qué tristeza se ha anidado en mi alma... que me roba la calma y
no me deja pensar. Soy como un ave perdida volando por los Monegros , sin una
dirección, buscando en cada nube alivio a su dolor, me duele esta soledad de vivir
pernoctando entre nubes de algodón y sueños perdidos en ese ayer... dejaste mi
vida llena de tristeza...
¿Tu mundo?
Ese lo has construido con
muros de piedra y pedazos de mi resquebrajado corazón, que hoy se rinde a ese
sentir y te dice adiós... Entre andamios rotos camino meditando, recogiendo
esos pedazos de vidrios, que han ido hiriendo mis ya antes alas rotas, me e hundido
en el mar de la desesperanza y mi dolor y temores han vuelto a mí... Sólo
quiero hoy pensar que mis manos y labios callarán ante este sentir que me mata,
que hace sentirme nada, al menos para tì.
¿Mis alas?
¡Esas rotas quedaron! Y no
podrán iniciar ese vuelo que esperaba hacia ese universo lleno de nubes blancas
que esperaban por mí, ahora se miran oscuras, cargadas de tormenta... pero sé
que si alguna vez vuelvo a nacer, seguiría el mismo sendero, siempre contigo y
pedir quedarme contigo hasta desfallecer.
Hoy, después de sentir que
contigo mi soledad se había quedado en ese pasado triste... y has dejado mi
corazón con ese sentimiento que solamente abarca mi vida y mis sentimientos se
van deshojando en lágrimas de desesperanza y de dolor...
¿Por qué estoy tan triste?
Porque fuiste esa ilusión de volver
a perderme en ti y sin haber probado de nuevo el dulzor de tus labios en un
beso soñado cada noche con los ojos abiertos, decidiste poner fin a este sentir
sin importarte para nada mi dolor.
Hoy escribo sin pensar, sin
rimas, en soledad, solamente mi corazón y lágrimas guían mis manos, que con
lento y desesperado proceder deslizan estas letras que nacen de mi alma, de mi
ser y de estas alas rotas que algún día volverán a sanar.
D,M,C,
No hay comentarios:
Publicar un comentario