Mi querida amiga:
La vida es un camino
misterioso y repleto de incógnitas: a veces estamos arriba y a veces sin
esperarlo y de repente estamos abajo, pero no podemos dejar que estos cambios
nos afecten. Pues cambiar es sinónimo de evolucionar, de ir a mejor, lo cual
forma parte de la vida sin remedio.
Hoy, he querido sorprenderte
con estas palabras por que eres alguien muy especial para mi y que me ha
marcado en muchas de las decisiones importantes de mi vida, por eso quiero que
entiendas que eres mi mejor amiga y que te quiero con todo mi corazón: tus
virtudes me hacen quererte como si fuéramos hermanos, por eso, y por que eres
una de las personas más originales y genuinas que conozco quiero pedirte que
nunca cambies, por que si cambias, te llevarías contigo una parte de mi muy
grande.
La amistad consiste en dar,
pero también en recibir, y por eso cuando te miro a los ojos veo toda esa serie de momentos que hemos
compartido comprendo que nuestra historia es algo que estará ahí siempre, que
me hará sonreír en los momentos más oscuros y me acompañará allá a donde vaya.
Hoy es un día especial, en el
que quiero que comprendas que tu amistad es un lazo sagrado para mi, un vínculo
que forma parte de mi personalidad y que no puedo olvidar por mucho que lo
intente, por eso te pido que no te vayas nunca de mi lado, por que eres sangre
de mi propia sangre, como una auténtica hermana.
Darte las gracias por todo lo
que has echo por mi se queda simplemente corto, por eso necesito que las
palabras queden grabadas, escritas sobre el papel eterno, para que las
mantengas junto a ti para el resto de la eternidad.
Con mucho cariño a ti
Domingo M.C.
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