Con tantos
palos que me dio la vida
y aún sigo
dándole a la vida sueños.
Soy un loco
que jamás se cansa
de abrir
ventanas y sembrar luceros.
Con tantos
palos que me dio la noche,
tanta
crueldad, frío y tanto miedo.
Soy un loco
de mirada triste
que sólo
sabe amar con todo el pecho,
fabricar
papelotes y poemas y otras patrañas que se lleva el viento.
Soy un
simple hombre alucinado,
entre
calles, talleres y recuerdos.
Soy un pobre
loco de esperanzas
que siente
como nace un mundo nuevo.
Con tantos
palos que me dio la vida
y no me
canso de decir ”te quiero”
Domingo Martin C,
No hay comentarios:
Publicar un comentario