Te amo porque logras sacar el
mejor de mí. Puedo hablar de amor porque te he conocido. Amo tu fabuloso
sentido del humor. Cada vez que miro en tus ojos, mi corazón sufre un golpe, un
golpe que me regocija y llena de felicidad. Gozo el hacer de cosas contigo y
pasar tiempo a tu lado. Eres simplemente irresistible.
Me siento a veces perdido y
fuera de mí, pero cuando estás a mi lado, me siento seguro. Tu voz me calma.
Podría sentarme aquí e intentar decirte apenas cómo me siento, sólo que no
puedo encontrar las palabras para demostrarte que tú me hacer sentir como si el
paraíso estuviera en tus ojos, en tus besos y en tus abrazos. Todo este amor
que me haces sentir, me eleva al más infinito grado de felicidad, y siento que
es un regalo de Dios. Este sentimiento no la había sentido en mucho tiempo y no
pensé que contigo volvería a sentir el único y verdadero amor. Hemos crecido
lentamente en una relación hermosa que solamente tú y yo podemos entender.
Tú te has convertido en mi
mejor amiga, mi amante y mi compañera del alma. Tú eres una bendición que mi
ser entero está muy agradecido. Siento que nos hicieron para amarnos, para
escucharnos, para entendernos, y para trabajar todas las veces en nuestra vida
juntos, un regalo verdaderamente raro pero hermoso.
Ambos hemos conocido tanto de
nuestras vidas; ambos hemos estado lastimados y hemos perdido confianza, pero
te pido que me des una oportunidad y yo te daré muchas. Oportunidad para
demostrarte que el amor que sentimos el uno al otro es lo mejor de nuestras
vidas.
A partir de este momento hago
un juramento y una promesa. Juro por Dios Laura que este amor siempre será tuyo y
prometo que siempre te amaré como te mereces.
Amor siempre,
Domingo M.C.
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