Cariño:
Vamos a dejar de lado las
heridas y los resentimientos pues si continuamos con esta obstinada
intolerancia vamos a acabar con este amor verdadero.
Si no somos un poco más
tolerantes, si cada uno no asume sus errores, podemos destruir todo lo bueno
que tenemos, bello y humano y que nos llevó un tiempo construirlo. Estoy
dejando mi orgullo de lado para pedirte disculpas por lo que hice y hacerte daño en palabras o
en omisiones.
El distanciamiento no es la
solución a nuestros problemas. Si no somos un poco más “inteligentes”, tal vez
no tengamos tiempo para solucionar los errores que estamos cometiendo ahora.
Si querías oírme pedir
disculpas te las pediré toda las veces que haga falta, lo estoy haciendo ahora,
en nombre de todo lo bueno que todavía nos une. Acéptalas por favor. Perdóname
ya y vamos a poner en plato limpio nuevamente nuestra bonita relación.
Espero tu vuelta con
desespero por que te amo sin limites Laura.
Domingo M.C.
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